28 de febrero de 2013

FRACTURAS [Traumatologia]



Concepto: 
La fractura se define como “solución de continuidad del tejido óseo” con una extensión y dirección determinada que denominamos “trazo de fractura”. Sin embargo, la lesión aislada del hueso por traumatismo es excepcional, por el traumatismo o por el desplazamiento de los fragmentos óseos, siempre hay lesión de partes blandas (músculos, tendones, vasos, etc.) por contusión o desgarro, por el propio traumatismo o por el  desplazamiento de los fragmentos. Se utiliza el término de “foco de fractura” para el conjunto de la lesión ósea y de las partes blandas vecinas.


Importancia:
La lesión de las partes blandas tiene gran importancia en el pronóstico de las fracturas. La curación de las fracturas depende del estado vascular de los fragmentos óseos a través de los vasos que penetran en la inserción de las partes blandas. Por otro lado, la lesión de las partes blandas puede provocar trastornos funcionales aun más importantes que la lesión ósea. En el tratamiento de las fracturas debe prestarse tanta atención a las partes blandas como al hueso.


Localizacion:
En las fracturas son posibles numerosas y graves complicaciones locales regionales y generales: entre estas últimas el shock hipovolémico, tromboembolismo y la embolia grasa. 


Clasificacion:
La gravedad de una fractura depende de múltiples factores: lesión de partes blandas, complejidad del trazo de fractura y las dificultades que puedan encontrarse para la reducción e inmovilización necesarias para su curación. 

Son lesiones bien distintas una simple fisura ósea y una fractura multifragmentaria provocada por arma de fuego. El simple diagnóstico de “fractura” no es suficiente para conocer la gravedad de la lesión, deben añadirse otros términos, unos calificativos que den la máxima información posible. La clasificación de las fracturas no es un aspecto puramente académico, tiene un sentido práctico al aportar datos que completan el diagnóstico de la fractura, informándonos del pronóstico y de las dificultades terapéuticas. 

La distinción entre fracturas por mecanismo directo e indirecto ya es una forma de clasificar las fracturas.



Clasificacion segun la relacion del foco de fractura con el exterior: 
Son fracturas cerradas cuando el foco de fractura no ha establecido contacto con el exterior, porque se conserva la continuidad de la piel o algún plano muscular o fascial que aísla el foco de fractura. 

Cuando la lesión de partes blandas es abierta y comunica el foco de fractura con el medio ambiente hablamos de fractura abierta. Si se produce una herida  que no llega al foco de fractura no debe considerarse como  una fractura abierta, tan solo una simple herida sobre una fractura cerrada. 

La fractura abierta tiene mucho peor pronóstico por la contaminación y posibilidad de una temible osteomielitis y porque se producen por mecanismos muy violentos y el daño de partes blandas suele ser mayor. 



Clasificacion segun los desplazamientos:
Se consideran fracturas no desplazadas cuando los fragmentos óseos no han perdido su normal relación y se conserva la morfología del hueso. Si hay desplazamiento de los fragmentos, son fracturas desplazadas.



Clasificacion segun la Estabilidad:
Clásicamente se consideran fracturas estables aquellas inicialmente no desplazadas o aquellas desplazadas que tras la reducción por métodos no quirúrgicos se mantienen bien alineadas, al menos en reposo. 

Son fracturas inestables las desplazadas que tras la reducción tienden a desplazarse por la fuerza de la gravedad, por la elasticidad de las partes blandas y sobre todo por la acción de los músculos que se insertan en los distintos fragmentos.



Clasificacion segun la morfologia del trazo de fractura: 
Según el trazo de fracturas se consideran dos grandes grupos: las fracturas completas y las fracturas incompletas. Fracturas completas son aquellas que el trazo de fractura afecta a todo un plano del hueso, formándose dos o más fragmentos entre los que es posible el desplazamiento.

Las  fracturas incompletas afectan solo parcialmente un plano del hueso, no hay fragmentos, aunque el hueso puede quedar deformado.

  • Fracturas Completas:
  1. Fracturas transversas: Tienen su trazo transverso al eje mayor del hueso. Es una fractura producida por una fuerza de cizallamiento  por mecanismo directo.
  2. Fracturas transversas: delimitando un tercer fragmento. Denominadas también fracturas en ala de mariposa por la morfología del tercer fragmento. Son producidas por un mecanismo de inflexión cuando actúan dos fuerzas del mismo sentido en ambos extremos del hueso teniendo éste un punto de apoyo en el centro; o bien una sola fuerza que actúa en la porción central del hueso teniendo éste un doble punto e apoyo en ambos 5 extremos. En el primer caso sería un mecanismo indirecto y en el segundo un mecanismo directo.  Son difíciles de estabilizar, pero consolidan mejor que las  transversas, al ser el trazo de fractura más extenso y el mecanismo de producción en muchos casos indirecto. 
  3. Fracturas oblicuas: El trazo es oblicuo al eje mayor del hueso. Se producen también por un esfuerzo de inflexión, pero en este caso es una fuerza externa que actúa sobre un extremo del hueso, estando el otro fijo. Son fracturas sin grandes problemas para la consolidación por ser por mecanismo indirecto y la superficie de contacto amplia entre los fragmentos óseos. El principal problema que plantean es controlar el acortamiento entre los fragmentos que tienden a deslizarse entre sí. 
  4. Fracturas espiroideas: Propias del hueso diafisario, tienen un trazo oblicuo pero describiendo una espiral en la cortical que se completa con un pequeño trazo transverso en ambos extremos. Son por mecanismo indirecto de torsión con poca lesión de partes blandas y siempre quedan colgajos periósticos o musculares que evitan los desplazamientos laterales, además de garantizar un buen aporte vascular para la consolidación. La gran extensión del trazo de fractura facilita la formación del puente perióstico periférico que permite una rápida consolidación. Son fracturas fáciles de estabilizar, manteniendo una rotación en sentido inverso al mecanismo de producción, por lo que deben considerarse fracturas de muy buen pronóstico. 
  5. Fracturas conminutas: Llamadas también fracturas polifragmentarias o multifragmentarias, poseen múltiples fragmentos, originadas por traumatismos muy violentos, bien por golpes directos o bien por compresiones axiales. Cuando hay un número corto de fragmentos de tamaño sustancial, se habla de fracturas de tres, cuatro, cinco o seis fragmentos. El término de multifragmentaria o conminutas se reserva a las fracturas con fragmentos más numerosos y de muy desigual tamaño. Cuando además de ello el desplazamiento de los fragmentos es muy importante se utiliza el término de fractura por estallido. Son las fracturas más graves considerando solo el trazo de fractura. Su reducción es siempre compleja e imperfecta, su estabilización es difícil al no poder contar con un buen engranaje de los fragmentos y las lesiones de las partes blandas son de gran intensidad. 
  6. Fracturas por arrancamiento: En realidad son fracturas de tipo transverso, no obstante tiene suficiente personalidad para concederles un apartado propio. Son propias del hueso esponjoso (epífisis de huesos cortos) por mecanismo indirecto; una tracción violenta de las estructuras ligamentosas o tendinosas que se insertan en una porción ósea, especialmente si de trata de inserciones de músculos muy potentes. El trazo de fractura suele ser de trazo simple, lo que unido al hecho de asentar en hueso esponjoso, de fácil consolidación lleva a pensar que son de muy buen pronóstico, sin embargo, no carecen de dificultades; el fragmento que queda solidarizado a la parte blanda donde se efectuó la tracción es tirado por la elasticidad o la capacidad contráctil de dicha estructura, siendo muy difícil mantener la reducción sin una fijación quirúrgica. 
  7. Fracturas longitudinales o verticales: Tienen un trazo de fractura en el eje mayor del hueso. Son excepcionales en hueso diafisario, suelen localizarse en huesos planos 6 (escápula, pelvis), provocados por mecanismo directo, o en las epífisis en forma de fractura intraarticular, provocada por una compresión axial que se traduce en fuerzas de cizallamiento. Por ser generalmente poco desplazadas, asentar en hueso esponjoso y ser de trazo largo, consolidan con facilidad.
  • Fracturas Incompletas
  1. Fracturas en tallo verde: Son fracturas propias de los huesos largos del niño por las características estructurales y mecánicas del hueso durante el crecimiento.  
  2. Fractura en rodete: Se trata de una deformidad plástica del hueso en crecimiento por un mecanismo indirecto que transmite fuerzas de compresión en el eje longitudinal de un hueso largo. Es propia de la zona metafisaria, típica de la extremidad distal del radio al caer apoyando el talón de la mano. Su nombre se fractura en rodete o en caña de bambú viene dado porque la deformidad plástica disminuye de forma inapreciable la longitud del hueso y lo ensancha en la zona de la lesión, dibujando un rodete que recuerda el nudo de una caña de bambú. Curan con facilidad y solo requieren una inmovilización analgésica de escasos días. 

Clasificacion segun su localizacion: 
Esta clasificación hace referencia a los huesos largos, que por estar constituidos en parte por hueso cortical y en parte por hueso esponjoso, los problemas son diferentes según donde se localiza el trazo de fractura. Se distingue: fracturas diafisarias, metafisarias y epifisarias. 

Las  fracturas diafisarias plantean más problemas de reducción y estabilización porque lo músculos que se insertan en los distintos fragmentos actúan con largos brazos de palanca. Por asentar en hueso compacto son de consolidación lenta. Los desplazamientos suelen ser mayores con mayor índice de fracturas abiertas y las complicaciones de lesiones vasculares y nerviosas son más frecuentes que en otras localizaciones. 
    La fracturas epifisarias son más benignas que las anteriores en cuanto a las complicaciones inmediatas y su consolidación es fácil al asentar en hueso esponjoso. Sin embargo, por ser fracturas paraarticulares o  articulares (el trazo rompe la superficie articular) son frecuentes las secuelas articulares (rigideces, artrosis postraumática, desviaciones axiales etc...) que nos deben obligar a ser mucho más estrictos en la reducción y las medidas de rehabilitación. 

    Las fracturas metafisarias, teniendo en cuenta que la metáfisis es un hueso de transición entre la estructura esponjosa de la epífisis y la estructura cortical de la diáfisis, están a mitad de camino en cuanto a las ventajas
    y desventajas de las dos anteriores.


    Diagnostico:
    El diagnostico es simplemente una radiografía de la zona afectada


    Tratamiento:
    El tratamiento consiste en solucionar la fractura y esto sera hara de acuerdo a el criterio del especialista en traumatologia

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